DESPUÉS DE LA ESCALERA

Agosto de 2005

Hace treinta años, se suponía que uno debía avanzar a lo largo de la escalera corporativa. Esa ya no es tanto la regla ahora. Nuestra generación quiere que le paguen por adelantado. En lugar de desarrollar un producto para una gran compañia con la esperanza de conseguir a cambio estabilidad en el empleo, desarrollamos el producto nosotros mismos, en una startup, [a] y se lo vendemos a la gran compañia. Por lo menos queremos opciones.

Entre otras cosas, este cambio ha creado la apariencia de un rápido aumento en la desigualdad económica. Pero en realidad los dos casos no son tan diferentes como se ven en las estadísticas económicas.

Las estadísticas económicas son engañosas porque ignoran el valor de los puestos de trabajo seguros. Un trabajo fácil del que no se puede ser despedido vale dinero; intercambiar los dos es una de las formas más comunes de corrupción. Una sinecura es, en efecto, una renta vitalicia. Excepto que las sinecuras no aparecen en las estadísticas económicas. Si lo hicieran, sería evidente que en la práctica los países socialistas tienen grandes diferencias en la riqueza, ya que suelen tener una clase de burócratas poderosos que son pagados principalmente por antigüedad y no pueden ser despedidos.

Aunque no es una sinecura, una posición en la escalera corporativa era verdaderamente valiosa, porque las empresas grandes trataban de no despedir a la gente, y promovían desde dentro basados en gran medida en la antigüedad. Una posición en la escalera corporativa tiene un valor análogo a la "buena voluntad" que es un elemento muy real en la valoración de empresas. Eso significaba que uno podía esperar en el futuro puestos de trabajo bien remunerados.

Una de las principales causas de la decadencia de la escalera corporativa es la tendencia de las adquisiciones que se iniciaron en la década de 1980. ¿Por qué perder el tiempo subiendo una escalera que podría desaparecer antes de llegar a la cima?

Y, no por casualidad, la escalera corporativa fue una de las razones de que los primeros cazadores corporativos tuvieran tanto éxito. No son sólo las estadísticas económicas las que ignoran el valor de los trabajos seguros. Las hojas de balance de las empresas también lo hacen. Una de las razones por las que era rentable dividir las empresas en los 80s y venderlas por partes era que no habían reconocido formalmente su deuda implícita a los empleados que habían hecho un buen trabajo y esperaban ser recompensados con puestos ejecutivos bien pagados cuando llegará su tiempo.

En la película Wall Street, Gordon Gekko ridiculiza a una empresa sobrecargada de vicepresidentes. Pero la empresa puede no ser tan corrupta como parece; esos cómodos trabajos de vicepresidente eran probablemente el pago por el trabajo realizado anteriormente.

Me gusta más el nuevo modelo. Por un lado, me parece un mal plan tratar los puestos de trabajo como recompensa. Muchos buenos ingenieros se convirtieron en malos gerentes de esa manera. Y el viejo sistema significaba que la gente tenia que lidiar con mucha más política corporativa, con el fin de proteger la inversión que habían hecho en el trabajo por una posición en la escalera.

La gran desventaja del nuevo sistema es que implica más riesgo. Si desarrollas ideas en una startup en lugar de hacerlo dentro de una gran empresa, una serie de factores aleatorios podría hundirte antes de que puedas terminar. Pero tal vez la vieja generación se reiría de mí por decir que la forma en que hacemos las cosas es más riesgosa. Después de todo, los proyectos en las grandes empresas siempre estaban cancelándose como resultado de las decisiones arbitrarias tomadas más arriba. Toda la industria de mi padre (reactores reproductores) desapareció de esa manera.

Para bien o para mal, la idea de la escalera corporativa se ha ido para siempre probablemente. El nuevo modelo parece más líquido, y más eficiente. Pero no es un cambio muy grande, financieramente, como uno podría pensar. Nuestros padres no eran tan estúpidos.

 


Traducido de After the Ladder por Paul Graham. Traducción: Armando Alvarez

 

 

Notas del Traductor

[a] El termino startup define a una empresa de reciente creación orientada a la tecnología. El mismo Paul Graham la define a la perfección en Como Financiar una Startup: "Una empresa tiene que ser más que pequeña y de reciente creación para ser una startup. Hay millones de pequeñas empresas en Estados Unidos, pero sólo unas pocas miles son startups. Para ser una startup, una compañía tiene que ser un negocio de productos, no un negocio de servicios. Lo que no quiere decir que tiene que hacer algo físico, sino que tiene que tener una cosa que vende a mucha gente, en vez de hacer trabajos a medida para clientes individuales. El trabajo sobre encargo no es escalable. Para ser una startup tienes que ser la banda que vende un millón de copias de una canción, no el grupo que gana dinero tocando en bodas y Bar Mitzvahs individuales."